Esto termina así: con una cabalgata tarde abajo luego de una exhaustiva jornada recogiendo setas silvestres para el consomé del bautizo y viendo qué rápido crecen los becerros del rancho de los Méndez. Al llegar a los terruños hay café en la olla de peltre y los troncos ya truenan, hinchados de fuego y viento…
La bruma campesina desciende desde el ingenio. A nuestras espaldas se ciernen los rayos rezagados de Ícaro y Caronte; roza la tenebra al horizonte y nuestras palmas se juntan con mágicos insumos de belleza, percatadas del milagro que nos significa la buena cosecha.
Tenemos tres perros irrisorios y veintisiete gallinas que nos alivian la tormenta. Hay mazorcas y un huerto pleno de lechugas verdes. Hay jarrones de barro y aguanieve de encino. Ella vende en Doble Río esencias de aguacate, curas de lima y mandarina que le trae su hermana de monte arriba y envueltos esbeltos de polluela blanca para males de amor, úlcera o engaño. Yo consigo atizar la lumbre de las quemas y generarle sana tala al del ingenio de Asunción; me paga a catorce la viruta y a treinta y dos las horas extra, me ofrece cobijo en la galera cuando toca vela para envíos y hasta permiso de tirar con la escopeta a los coyotes si se internan.
Y cómo me gustan mis manos hollinadas. Y cómo me mata cuando Magali se pone colorada y el humo hace que le lloren las pestañas. Doy fe de gusto, de vivo y de progresista.
< William Ackerman. Bricklayer's beautiful daughter >
- Nota al margen: la canción de entrada al post está mal referenciada. En realidad se trata de "Dolphins", compuesta e interpretada por Mike Marshall (guitarra y mandolina) y Darol Anger (violín); dúo que luego se daría a conocer como Montreux. -
6 comentario(s):
Buenas noches don, me alegra que te hayan gustado los cambios, las imágenes... justamente esa imagen que pones arriba, sobre la columna derecha, y que también cambias de vez en cuando fue lo que primero me llamó la atención de tu blog, y me invitó a seguirlo leyendo; me pareció una lectura muy ingeniosa.
Qué bellas imágenes encontré en tu escrito, sobre todo tus descripciones del fuego y del anochecer... todo tiene una atmósfera un tanto onírica, y me pregunto si el origen está en la realidad o en una ilusión.
ah, sí, il dolce far niente... aunque el caos también se extraña, de vez en cuando (no conozco la peli, tendré que buscarla, y bueno, para aquello del apocalipsis, creo que ya hemos empezado a pintarnos solitos).
El otro día estaba chismeando por tu sección de embajadas y me encontré con Carmen Consoli, cómo es que la conoces? fue una sorpresa muy linda, me hizo dar un salto de diez años pa' tras, y otro de diez años pa' delante; sólo conocía el disco del '98 y he estado re-descubriéndola estos últimos días.
Bueno, esto como que ya ameritaría un mail, te mando un gran abrazo!
¡Ei, señorina! il dolce far niente... tenía algun tiempo de no esccuhar la frase; mi madre la aplica mucho.
Y ya que estamos tan en lo italiano, te comento que a Carmencita la conocí (como casi todos) por su mágica canción para la película "il ultimo baccio", y luego llegó a mis manos "l'eccezione" (ese disco que mencionas) para que así cuajará más el enamoramieto.
Lo mejor fue que hace dos años sacó al mercado el genial "eva contro eva" (ampliamente recomendable)...
De hecho, hace poco escribí algo de despecho donde colgué su más reciente video:
http://jmedrano.blogspot.com/2008/05/escupitajo.html
Te mando -con cariño de cibernauta-un beso y abrazo. Salud.
fe de erratas: cuajará / cuajara
órale, no sabía de la peli, la buscaré... yo la verdad no conocía a nadie que conociera a la consoli más que a mi hermana - el disco que conocía era el de mediamente histerica, de hecho, que mi hermana compró cuando estuvimos estudianto un tiempo en florencia en el 98. El de l'eccezione lo estoy escuchando ahorita, de hecho; creo que eva contro eva es mi favorito. Gracias por el hallazgo!
copiándole el estilo, fé de erratas: histerica/isterica. igual te dejé un comentario en el post, y otro en el de cronopios.
Vale, abrazos!
sé que esta línea de, ahora, 6 comentarios estará sonando de lo más presumida y fantoche (Ursula vs Juan Carlos) pero qué nos importa:
¿con que estudiando por Florencia eh? / ¿italiano?, ¿algo en particular? / yo estuve ahí hace muchos ayeres... era todo un polluelo, pero aún recuerdo con agrado que me compré (como pude) un helado de vino blanco riquísimo en el Ponte Vecchio ¿así se escribe?, no ¿verdad?... en fin, pues me lo compré y lo disfruté mucho porque de allí me fui a pasear al giardino di Boboli ¿sí no? ¡por ahí anda! (dando la vuelta, te cruzas, caminas dos cuadras, doblas a la derecha, je! algo así)... emocionantes recuerdos.
Yo no fui a estudiar, fui de vago y sé que algun día regresaré, ya más grandecito y con harto dinero para malgastarlo comiendo puras pizzas de cebolla.
Ah, Italia... ¿por qué nos metimos en esta conversación?. Salud.
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