>
Este cerro es mi sangre en tierra, cueva para duendes y ventanal de raíces. Todo el que se interna buscando orquídeas y magdalenas siempre pierde la calma (o de plano se raja). Los que llegan arriba, a la punta chata de la loma, miran a mi pueblo y su montaña, y le dedican unas odas a la mañana. También el día de brujos hacemos fiesta, quemamos cañas, bebemos café con sal y lo escupimos en las muñecas de los aquejados. Del misticismo es de lo que quedo prendado, de la torpe realidad mejor me juyo...
Y ora sí que sí, chingao 'sierrense', ¡arquéele bien, don Ovidio!
Ya se rellegó la fiesta y a usted le pido me disculpe si por orita me adelanto y luego desdenantes ya me atraso. No me pida estar pegado al monitor, si afuera se desgastan las cuerdas y las mujeres, y a uno nomás le dejan puro toro chirriador.
Así que en esta segunda entrega,
sea tan amable de ver,
lo que hoy le traigo a este resquicio
de pachanga, y sin comer.
¡Ja - já! (qué del nabo).
En fin.
Porque es importante saber, que el 19 de julio, sin más, se pondrá a llover (¡coño, que no me se quita la gana de decimear!). Y mire usted que acá hacen una alfombra de acerrín coloreao que ya se la explico en el III. Luego me dirá si no es bonita, cheleando con don Andrés.
También, y por no perder la costumbre, dejo acá el enlace de la, hoy denominada, cámara celular peatonal para trasmisiones oficiales, entre otras labores, de la preparación a las que son sometidos los músicos que participarán del Alba: una juerga de madrugada entre soneros, tocotines, danzantes, payasos y toritos que, en el atrio de la Parroquia, esperan hasta las seis pa' cantarle mañanitas a la Santa.
Y allá me voy.
¡Hijoputa si no!, diría el Tío Pompe.
I.
Músicos tocotines ensayando para el Alba
(desde la casa de Tío Güevo, el brujo):
II.
Los soneros de Honorio Robles ensayando para el Alba
(Durante un festejo en el Rancho San Bartolo):
III.
... y un plus educativo:
<
martes, 15 de julio de 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
5 comentario(s):
¡Ah, chingao!
No sabía eso de las fiestas.
¡Y felicidades!... Se nota, se nota mano, que estás comprometidísimo con este blog.
La información es excelente.
¡Saludos, JC!
wow, qué maravilla - el relato, la música, el tapate, los videos - muchísimas gracias por compartirlo, (y por la invitacionsísima, ja, ya estás, o, más bien, ya estaré)
Abrazo!
Hola hola ...
Celeste: Pues tú que estás cerquita nomás basta que te decidas y por acá nos vemos. el mero día es el martes 22 (es una locura).
Ursula: me late que te estén gustando las entregas de Fiesta. A que en Vancouver no hacen tanto alboroto... a que no...
Comentario Suprimido: ¿no sería supreso? / no ¿verdad? / qué tontuelo. Pues a usted también, gracias por la visita.
Oiga usted, y de casualidad no conoce aquella canción que se llama el tragón. Sólo la he oido en el radio y cuando se las pregunto a los jaraneros en los portales de Veracruz nadie se la sabe.
Es una que a la letra dice algo así como: me comi esto, aquello, demás allá, y como no me pareció nada malo también pedí de lo otro y otro. En fin que se hecha una retahila de toda la comida jarocha y para rematar dice que no se ha llenado. Es más larga que la del El Barzón y la de Los Agachados.
Saludos
Publicar un comentario