< Segunda parte de Los continentes vencidos
Entonces se formaron miles, millones de colonias, billones de experimentos condenados a fracasar. La vida había estallado.
Origen, Juan Polaino
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I.
Nacemos con la memoria intacta. Somos el diseño idóneo de un pasado astral, sólo concebido en los falsos recuerdos de nuestros padres. Sabemos, al pisar por primera vez, la distancia exacta que hay del espacio exterior (antes habitado) a la tierra que prueban nuestros pies, aún vírgenes de sedimento.
Y entonces vamos midiendo, dejamos de soñar, probamos, aprendemos a mentir, tocamos; y en esas, sentimos de pronto que el mundo es nuestro.
II.
Acoplados al oxígeno, reconociendo sed y fuego, construimos. Cualquier elemento aquí es moldeable, pensamos. Y construimos más y en mejores formas. Construimos porque queremos escapar. Planeamos rutas y maneras de huir. Nos desbandamos, nos individualizamos, quizá (porque también lo hemos pensado) proveemos desproveyendo. Saqueamos. Tendemos a encerrarlo todo, a encajonar la flora, a desmembrar la fauna. Reformulamos ética y moral de los ladrones; damos golpes certeros.
III.
Sobre las luces viejas de nuestro andar terráqueo, pensamos de nuevo en ese ayer entre estrellas /// Solos y necios, morimos con la memoria colmada.
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Fotografías:
1, 4 y 14 - Lago de Chapala, Jalisco
2 - Sierra Madre de Oaxaca, Oaxaca
3, 15 - Mazatlán, Sinaloa
5, 7, 8, 9, 10, 11 y 13 - Xico, Veracruz
6 y 16 - Rancho Viejo, Veracruz
12 - Guadalajara, Jalisco
Entre 1999 y 2001
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miércoles, 25 de enero de 2012
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3 comentario(s):
Esto que acaban de leer/ver/escuchar, queridos caminantes, parte de un reencuentro con dos sobres amarillos que, entre garabatos, dictaban: "paisajes, naturalezas muertas, 1999 - 2001".
Aunque no hubo grandes revelaciones ni instantes de verdadera gloria fotográfica, volé hacia atrás. Escaparon algunas risas.
Días antes de aquel descubrimiento, miré (absorto y destemplado) la nueva película de Malick, "El árbol de la vida".
Hoy supe, al fin, qué hacer con todo esto. Y pese a lo escatológica que pudiera parecer la entrada, creo más bien que la idea es la posibilidad del cambio. Nuestro cambio para con lo que sólo nos es prestado.
A propósito de cambios: cada foto fue escaneada y mejorada en color y balance. ¡Qué posibilidades distintas me ofrecía la naturaleza antes de la digitalización de la imagen!
En fin; quería un recordatorio que no interrumpiera sus mirares. Al fin y al cabo, ya demasiada egolatría hay en publicar todo esto (y en tener un blog, en general).
Ojalá le disfruten tanto como yo al armarlo. ¡Saludos!
Me parece que las fotografía con geniales. Tienen el sabor del pasado y eso les da un toque que, con la era digital se ha vuelto imposible.
EL texto por su parte me gusta, como siempre.
Sí :-), sobretodo en la segunda y en las últimas tres; quedaron muy setenteras.
¡Gracias por leer! :-*
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